lunes, 23 de noviembre de 2009
Voluntad...política
Midiendo mi propia incapacidad para afrontar cambios puedo entender, que no comprender, la de las autoridades para hacer su trabajo. Llevo muchos meses intentando dar a este desierto foro alguna utilidad, y la única que se me ocurre requiere afrontar determinados cambios: me estoy refiriendo a la inclusión de este blog (para mí un simple ejercicio, placentero, de escritura) en alguna página de aprendizaje del Español para extranjeros. Para ello debería convertir las entradillas en archivos sonoros, y acompañar el texto de vínculos con la RAE para aclarar significados. ¿Fácil, no? Pues, aunque ahora parezco decidido a hacerlo, llevo mucho tiempo acomodado en la desidia.
Los gobiernos y otras élites no deberían permitírselo como nosotros, anónimos ciudadanos, lo hacemos. Sin embargo esa es la única explicación para el fracaso sistemático de tanto y tanto encuentro, necesario para resolver problemas acuciantes: La reunión de la FAO en Roma, el protocolo de Kioto (y el próximo de Copenhague), las resoluciones de la ONU sobre los problemas en el Medio Oriente, las reuniones de los foros económicos, etc.
La falta de voluntad política es mucho más seria que la falta de voluntad de cada uno de nosotros (aunque cada vez esté más claro que la revolución; a la que nos podemos ver abocados, vendrá desde abajo) y por eso se oyen, ya, voces que auguran una próxima moneda única mundial, seguida de cerca por…Un único gobierno mundial. Esto traerá muchas consecuencias, pero la más polémica será la implantación de una fuerza coercitiva también mundial (sin la cual no será posible lo anterior): ¿Orwell, Huxley, La guerra de las galaxias? Reminiscencias todas, cuanto menos desasosegantes.
¡Dios!, para ayudar a aprender español, primero he de aprender a escribir…fácil.
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1 comentario:
No les interesa lo más mínimo. No es falta de voluntad...¡Es de verguenza!
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