lunes, 13 de octubre de 2008

Glamour



En los desquiciados 90´s, la palabreja Glamour perdió su auténtico significado (y no estoy hablando de etimología), que no es otro que Encanto, hechizo. Lo hizo en boca de los gacetilleros del couché, que confundían elegancia e influencia con dinero y poder. En el mundo de la moda, por ejemplo, aunque los propios diseñadores rindieran pleitesía al underground pop, los infaustos plumillas no aceptaron jamas que las pasarelas fueran a remolque del auténtico streetwear. Para muestra valga un botón: he aquí a Lou Reed, curiosamente en Paris ¡y en 1974!,luciendo trasparencias y cortísimo pelo decolorado. Este miembro de la Velvet Underground, aquella banda que apadrinó Andy Warhol, aquel andrógino ser que viera alguna noche Nati Abascal en la época que lampaba por hacer de…¿muda? en Bananas de Woody Allen, canta …

I'm waiting for my man Twenty-six dollars in my hand Up to Lexington, 125 Feel sick and dirty, more dead than alive I'm waiting for my man…





¡Vaya glamourazo!

1 comentario:

K dijo...

Yo opino que entre el glamour y lo soez está el fiel de la balanza, un equilibrio necesario entre el snob submoderno y el hombre de las cavernas. Lo entendí así hace tiempo y es uno de los principios fundamentales de mi Constitución personal.

saludines!