¿ Nunca os habéis preguntado como es la vida de ese joven negro del top-manta, o de esa chica peruana que te cobra en el super, o del señor chino, que trata los noodles como si fuesen un diábolo, tras el cristal de la cocina en el asiático de moda?. Lo que cuenta Santiago Gamboa en "El síndrome de Ulises" puede daros unas cuantas respuestas, o quizá os obligue a haceros muchas más preguntas, porque, como todas las grandes novelas, es mucho más aleccionadora que cualquier ensayo. La historia se desarrolla en París, la capital de la Europa asediada y vanidosa, donde conviven "la Grandeur" con la legión de humillados por esa misma supuesta grandeza. La capital francesa, con su clima desapacible y su banlieue, tan mal diseñada para acoger a los bárbaros, se convierte en el escenario ideal para el pesimismo y la esperanza de los personajes, verdadero coro de esclavos moderno. Lo mejor: la narración en 1ª persona; clara y contundente. Lo peor: el puntito metaliterario, que es a las novelas de iniciación como el asesinato a la literatura negra: un elemento tan vulgar como imprescindible.
viernes, 22 de agosto de 2008
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